Tras un corto pero reparador descanso madrugamos para disfrutar de una jornada inolvidable: El Valle delos Reyes. La sensación de estar "realmente" en el Valle delos Reyes es indescriptible: por entrar andando con la vista hacia el Qurn, la montaña tebana, por poder visitar las maravillosas tumbas, por el paisaje, por la luz del día, por pisar la polvorienta tierra de los mismos faraones y artesanos, por oír "embelesados" al profesor, por todo...¡EMOCIONANTE! Las excavaciones permanentes en El Valle de los Reyes desde el siglo XIX hasta hoy han descubierto riquezas incalculables, y lo más importante, datos históricos de una civilización fascinante. Fue Tutmosis I quien decidió separar las tumbas reales de los templos funerarios, ubicando las primeras en lugares secretos e inaccesibles, dificultando los saqueos de los ladrones de tumbas. Desde entonces todos los faraones difuntos encontraron su lugar de descanso en este valle. En época ramésida las tumbas se localizaron en zonas más accesibles por lo que fueron las primeras en ser descubiertas. Fue Wilkinson en 1827 quien encontró la KV-1 perteneciente a Ramsés VII, y desde entonces fueron numeradas en orden correlativo. En 1881 en una cueva de Deir El-Bahari se encontraron las momias de un gran número de faraones enterrados en el KV. Sus cuerpos habían sido trasladados allí por los sacerdotes de la dinastía XXI, para evitar su profanación y saqueo.Fueron encontradas las momias de Amosis I, Amenofis I, Tutmosis I, Tutmosis II, Hatshepsut, Tutmosis III, Ramsés I, Seti I, Ramsés II y Ramsés IX. Visitamos:
Para saber más y visitarlas por dentro:
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